Hermoso plan (Rosamari)
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Hay
un hermoso Plan, es un Proyecto Divino, donde todos participan, aunque sea en
el olvido. Lo mueve un impulso grandioso, son esos mágicos hilos, que tienen
todo conectado, aunque te encuentres dormido. La semilla está instalada en el
interior de lo vivo. Es el Aliento sagrado y el Amor que está contigo, pero
nada es error, todo tiene su sentido, su por qué, su para qué, aunque te cueste
admitirlo. El humano lo aceptó, vivir el juego divino. Vivir esas experiencias
desde el estado dormido. Crea limitaciones, divisiones y partidos, es un punto
y un comienzo donde el dolor está activo, el sufrimiento se muestra para
encontrarle el sentido. Con preguntas y respuestas se puede entender el camino,
porque este Hermoso Plan cada día queda escrito. Se realiza en el Presente,
cada uno es testigo de expresar su divinidad y despertar de su olvido. Es el
Juego apasionante de ese dios que está vivo en cada cosa, cada ser, hacer lo
humano divino. Reconocer que ese dios está en ti y está activo, esperando que
le des paso, para que puedas vivirlo.
Recuerda:
Amanece, sale el Sol, está brillando para ti, un camino, un recorrido y muchas
cosas que vivir.
Agradeces
y sonríes, sabes que hay un latir, en un mismo Corazón, todo comienza a fluir y
sabes que estás protegido, que nada hay que temer, sientes la Vida vibrando,
percibes el sin hacer, sólo amar lo que tocas, sólo amar lo que ves.
Y
dejas de transformarlo, intuyes que todo está bien y cuanto más lo comprendes,
más abrazas lo que Es.
Son
momentos de la Vida, que conectas con pasión, con aquello que Es Real y marca
una vibración, más allá del tiempo y forma y sabes que es el Amor.
Y
esto te dura un instante, o quizá un poco más, te quedas maravillado porque
sabes que es verdad y enseguida conectas con la fuerza material. Con la
dimensión de la forma, en el cuerpo que ahora estás y te dejas seducir y
comienzas a escuchar, que las cosas son difíciles, que te tienes que esforzar,
que los sueños dejan de cumplirse, que te cuesta confiar, que hay personas que
te dañan y el sufrimiento se da.
Nada
tienes que hacer, nada tienes que cambiar, nada tienes que conseguir, tan sólo
has de despertar, de ese sueño de la mente y descubrir la verdad, eso lo puedes
hacer, la forma es meditar, escuchar el corazón y este te va a guiar.
Rosamari
Ramírez del Cerro
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