Las creencias sobre lo que ocurre tras la muerte del cuerpo físico
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Comunicación
recibida el 18/12/2024 (extracto textual de la sesión completa)
- ¿Qué consecuencias tienen
las creencias de que tras la muerte no hay nada o de que todo es armonía?
LA CREENCIA DE LA EXTINCIÓN
La
respuesta es muy importante para poder comprender, tanto a nosotros mismos,
como a las demás personas con las que nos relacionamos. Cuando una persona
tiene la convicción de que cuando desencarna, cuando su cuerpo físico deja de
funcionar, en ese momento toda su realidad desaparece, es evidente que hará
todo lo posible para aprovechar el momento presente sin importarle lo que pueda
ocurrir después, porque eso ya no será de su incumbencia, entendido desde este
punto de vista. Esta actitud conduce al egoísmo y hace que las personas se
desentiendan de las necesidades de los demás, atienden a sus propias
necesidades, a sus propios caprichos, a sus propios deseos.
LA IMPORTANCIA DE COMETER ERRORES
Pero
es una de las etapas necesarias en el proceso evolutivo, porque solamente
cuando se conoce la oscuridad se aprecia la luz, y es necesario conocer esta
oscuridad de la ignorancia a través de las propias experiencias para poder
superarlas. Comprendiendo esto, podremos valorar todos nuestros errores como
grandes aprendizajes que la vida nos otorga y que podemos aprovechar, y que
podemos agradecer incluso. De hecho, debemos agradecerlos, porque esos errores
son los que más enseñanzas nos aportan, porque nos muestran caminos que
desconocíamos, caminos que considerábamos correctos y, gracias a estos errores,
hemos podido comprender que estábamos equivocados. Este proceso hace que los
seres evolutivos puedan ir avanzando en este camino de luz. Entended [la importancia
de] los errores, porque son necesarios.
LA VÍA DE ESCAPE DEL SUICIDIO
Cuando
los seres encarnados consideran como realidad que su desaparición de la vida
encarnada es la desaparición total, como ya os hemos dicho, tienden hacia el
egoísmo, pero también hace que las personas que se encuentran en situaciones de
grandes niveles de sufrimiento puedan plantearse el suicidio como una forma de
escape. Al fin y al cabo, desde ese punto de vista, encontrarse en esa
situación desesperada carece de sentido si no existe el consuelo, la esperanza,
de un futuro mejor. Es muy importante entender que este punto de vista es muy
pernicioso en el transcurso de la experiencia de la vida encarnada.
LA CREENCIA DE “CIELO PARA TODOS”
Pero
también existe el concepto, la creencia, de que cuando se desencarna, se pasa a
niveles espirituales tremendamente gloriosos, amorosos y felices. Con esta
forma de entender la realidad, de creer la realidad de la desencarnación, ante
situaciones graves y desesperadas, el suicidio también es una oportunidad para
poder ir a esa otra experiencia más agradable. De hecho, incluso desde
situaciones neutras que podamos considerar, o desde situaciones agradables, se
puede plantear esta posibilidad, puesto que, si se va a experimentar una dicha
sublime al desencarnar, cuanto antes se pueda hacer, cuanto antes se pueda
llegar a esta experiencia, sería mucho mejor. Esto nos haría entender que la
experiencia de la vida encarnada carece de sentido, que la justicia de Dios le
da lo mismo al justo que al injusto, que todos alcanzamos la misma meta,
tengamos o no tengamos mérito, hallamos el experimentado la grandeza, la
riqueza y la felicidad, o la miseria, la ignorancia y el dolor.
CONCLUSIÓN FINAL
Podríamos
comprender perfectamente que estas dos formas de entender la trascendencia del
alma una vez que muere el cuerpo físico son dos modelos que pueden, en primer
lugar, incitar al suicidio y, en segundo lugar, desanimar a los seres en su
experiencia de la vida encarnada.
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